Por José A. Cañizo
Este problema
se lleva la palma en la categoría de problemas confusos. No es
demasiado conocido y espero que sea nuevo para muchos. La pregunta
es:
Los espejos,
como cualquiera sabe, invierten la izquierda y la derecha, en
el sentido de que la mano izquierda de mi reflejo en él es mi
mano derecha. Pues bien, ¿por qué los espejos no invierten igualmente
arriba y abajo?
Ya
he dicho antes que la pregunta es engañosa; lo que no es es fácil,
aunque pueda parecer eso a primera vista. En uno de los libros
de Martin Gardner, Izquierda y Derecha en el Cosmos en la traducción
española, se dedica un capítulo entero a la solución, así que
la pregunta, al menos, da qué pensar. Lo más sorprendente de ella
es que inicialmente parece que uno debiera saberlo. Pero si es
una tontería, hombre. Es porque... a ver cómo lo explico... Nada,
nada de eso. No es fácil.